La vitamina D es fundamental para el metabolismo del calcio, el fósforo y para un correcto desarrollo.
La vitamina D3 es una vitamina liposoluble (soluble en grasa) que la piel sintetiza al exponerse a la luz solar y/o a través de una correcta suplementación. Afecta positivamente al estado de ánimo y al bienestar así como a la salud de los huesos y de las articulaciones.
La falta de calcio en la dieta puede derivar en raquitismo, alteraciones en el cartílago del crecimiento o patas arqueadas.
Cuando nuestras mascotas son mayores, pueden padecer enfermedades que producen hipocalcemia (poca cantidad de calcio en la sangre); o si las dietas no incluyen suficiente calcio pueden causar descalcificación ósea y provocar que sus huesos sean más débiles y se fracturen con frecuencia. Pero, cuidado, porque si suministramos más calcio del que requieren podemos provocar una calcificación excesiva en los tejidos blandos, sobretodo en el riñón, y además, pueden presentar deformidades.